El pasado 8 de Junio se hizo realidad un importante anhelo y un hito en la gestión administrativa de la hermandad, podemos anunciar con la mayor de las alegrias la cosecución por fin de las escrituras de las casas de hermandad que tiene esta corporación en el Rocio.

Desde las concesiones de los terrenos en 1880 la casa del Real y en 1935 la de Doñana las distintas juntas de gobierno han intentado regularizar la titularidad de esos espacios, hecho que hasta ahora no habia sido posible. Esta gestión ha sido dirigida de forma casi exclusiva por nuestro presidente con la colaboración de varios hermanos y no hermanos situados en puestos clave para complementar todos los pasos necesarios.

Estas escrituras ya se encuentran en nuestro archivo y entendemos que esta noticia nos alegrará a todos, a los miembros de otras Juntas que han dejado su trabajo y su tiempo para lograr este objetivo porque tambien a ellos hay que agradecerselo y a toda la hermandad, porque este es un patrimonio que quedará ya para las futuras generaciones.

Sin duda,todos estamos de la mejor enhorabuena y como no, dar las gracias a nuestra madre y señora del Rocío, guia y luz de nuestro camino.